Me encantó la vista de la montaña, aunque la ducha era tan pequeña que luché constantemente por no quedarme atrapado. Además, esperaba atención especial como un cliente VIP, pero recibí solo lo básico. No entiendo por qué no se esfuerzan más. Casi escribo una buena reseña, pero no pude verídicamente.

Excelente comida con sabores auténticos de la región.

Mi estancia fue algo decepcionante. La cama era incómoda y las almohadas demasiado blandas, lo que dificultó mi descanso. Además, la calefacción estaba demasiado alta durante la noche, lo que hizo la experiencia aún más incómoda. Mi habitación tenía una televisión que no se veía bien, lo cual fue un poco frustrante.

bonito lugar pero con almohadas mejorables

La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar. Las vistas desde la habitación eran impresionantes, perfectas para relajarse. La cena fue deliciosa y resaltó los sabores de la región.

Las almohadas eran demasiado blandas, lo que afectó mi descanso.

a. Comida espectacular
b. Trato excepcional
c. Entorno tranquilo

a. Ducha pequeña
b. Habitaciones ruidosas

Pasamos un fin de semana increíble en la Posada de Serrada. La atención del personal fue excepcional y la comida, especialmente el desayuno, estaba deliciosa. El lugar tiene un encanto rústico y está perfecto para desconectar, aunque la ducha era un poco pequeña. ¡Repetiría sin dudarlo!

La atención de los dueños, Teresa y Nacho, fue excepcional. se nota que se preocupan por el bienestar de sus huéspedes.

La ducha era bastante pequeña, lo que pudo ser incómodo para algunos de nosotros, especialmente al cerrarla.

Entorno precioso y comida increíble.

El lugar tiene un encanto rural increíble, con vistas a montañas y un excelente restaurante donde la carne es espectacular. Además, se permite llevar mascotas, lo que lo hizo aún más especial para nosotros.

me sentí genial, no me puedo quejar

Un rincón de tranquilidad

Estuvimos una noche y lo pasamos genial. El lugar es precioso, en medio de la naturaleza y es ideal para desconectar. La habitación tenía unas vistas alucinantes. La comida en el restaurante es tremenda, especialmente el pisto. Aunque el baño podría ser un poco más amplio, todo lo demás fue perfecto.

La Posada de Serrada es un lugar encantador. Me encantó el ambiente rural y la tranquilidad que se respira. La habitación, aunque un poco pequeña, tenía unas vistas impresionantes a las montañas. El restaurante es un gran punto a favor. la comida fue exquisita, especialmente el pisto, que fue el mejor que he probado. La atención de los propietarios, Teresa y Nacho, fue muy amable y cercana, lo que hizo que nos sintiéramos como en casa. Sin embargo, las almohadas eran demasiado blandas para mi gusto, pero entiendo que esto es subjetivo. El baño podría haber sido un poco más espacioso. la ducha era un poco incómoda. A pesar de estas pequeñas pegas, disfruté mucho la estancia y me gustaría volver por la comida y el ambiente acogedor que se crea allí.

Las habitaciones son tan acogedoras que es como dormir en una nube. Con vistas a las montañas y comodidades completas, me sentí como un rey en su castillo. ¡Y el spa! Es el lugar perfecto para relajarme después de un día de exploración, como si estuviera en un cuento de hadas lleno de burbujas.

Algunas habitaciones ruidosas

Un lugar espectacular para desconectar, con un ambiente tan relajante. Atención del personal de lujo, siempre amables. La habitación era perfecta, aunque un poco pequeña. La comida, ¡ni se diga! Todo casero y riquísimo. Sin embargo, la ducha algo incómoda. Volvería sin pensarlo dos veces.

Ubicación divina, rodeada de naturaleza y paz. Habitación pequeña pero con mucho encanto, todo limpio. La atención de Juana, un lujo. Ideal para desconectar del ruido. Aunque un poco alejado, el encanto del lugar y la buena onda de la gente lo compensan.

La paz del entorno es inigualable, lo que permite un descanso profundo. Las vistas desde la habitación son impresionantes, perfectas para disfrutar durante todo el día.

Sin embargo, hay que mencionar que las paredes no están insonorizadas, lo que supuso un problema cuando la habitación contigua tuvo una discusión que se prolongó hasta altas horas de la madrugada. Además, la ducha es bastante pequeña, lo que puede ser incómodo para muchos. Las camas podrían ser mejoradas para un mejor descanso.

Las vistas eran impresionantes, pero el colchón estaba incómodo y usado.